Sugerimos deleitar las comidas festivas saludablemente, evitando caer en excesos, malestares digestivos e intoxicaciones.
Aquellas personas con patologías como diabetes, hipertensión, enfermedades renales, cardiovasculares o digestivas deben extremar los cuidados en estas ocasiones, ya que hay quienes cocinan comidas altamente calóricas, con exceso de sal, azúcar y grasas.
Se pueden incorporar hábitos saludables, sin dejar de disfrutar:
- Evitar llegar a la cena con hambre. Hacer todas las comidas del día livianas pero completas.
- Masticar varias veces y comer lentamente. Esto ayuda a evitar que se coma en exceso, ya que le da tiempo al intestino para enviar la señal de saciedad al cerebro.
- Intercalar agua si se bebe alcohol.
- Mantener la limpieza o higiene en la cocina.
- Elegir alimentos y preparaciones sencillos y frescos.
- Incorporar frutas y verduras de estación, teniendo la precaución de lavarlas cuidadosamente para evitar tanto la contaminación microbiana como la presencia de productos químicos.
- Evitar los platos con exceso de sal, azúcar, grasas y calorías.
- Los días anteriores y posteriores a las fiestas continuar realizando las 4 comidas y el consumo de agua.
- Elaborar recetas livianas, a base de carnes magras de vaca o aves sin piel. Reducir el consumo de fiambres y embutidos.
- Mantener los alimentos a temperaturas seguras: cuidar la cadena de frío si se trasladan alimentos a la casa de otra persona.
- Elegir bebidas sin azúcar, como agua, soda, gaseosas light y jugos de frutas naturales. Moderar el consumo de alcohol y designar a un conductor que no beba bebidas alcohólicas.