En la pileta de casa o en la del club, en lagos, ríos o en el mar, es importante tener algunas precauciones para evitar accidentes.
Lo fundamental es que haya siempre un adulto que sepa nadar controlando a los niños. Es aconsejable también tratar de enseñarles a ellos a nadar lo antes posible.
Asimismo, se debe evitar que los chicos jueguen o se sumerjan en aguas no autorizadas o desconocidas. Es importante enseñarles a respetar las señales de peligro.
¿Cómo prevenir las infecciones que se transmiten por el agua?
Nunca bañarse en agua estancada.
Lavarse bien las manos con agua y jabón después de ir al baño.
Si un niño tiene diarrea, evitar que se meta en la pileta.
Cambiar el agua de la pileta diariamente o agregar cloro. El cloro destruye los gérmenes que ocasionan las infecciones transmitidas por el agua.
Evitar tragar agua.
Para evitar infecciones en los oídos, secarlos bien después del baño con una toalla, de manera suave e inclinando la cabeza hacia los lados para permitir que salga el agua.